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Minorador de pH sólido para piscinas Q-Minus
Producto sólido granulado, para ajustar el pH del agua de la piscina cuando éste sea superior a 7,6. Es indispensable para un óptimo tratamiento del agua y para evitar las molestias que un desequilibrio de pH puede producir en la piel y los ojos de los bañistas.
Producto sólido granulado, para ajustar el pH del agua de la piscina cuando éste sea superior a 7,6. Es indispensable para un óptimo tratamiento del agua y para evitar las molestias que un desequilibrio de pH puede producir en la piel y los ojos de los bañistas.
ESPECIFICACIONES:
Densidad |
1,400 – 1,450 g/cc |
pH |
1,00 – 1,20 (25ºC) |
Estabilidad |
Mínimo 3 meses |
Composición |
Bisulfato sódico |
Aspecto |
Polvo cristalino amarillento |
Producto homologado por la Dirección General de Salud Pública y de Consumo Nº 08 – 70 - 1757.
Caja de 4 cubos de 8Kg
ADVERTENCIAS:
- Características:
Producto clasificado como IRRITANTE.
- Manipulación: se aconseja revisar la hoja de seguridad del producto.
- Transporte: NO precisa TRANSPORTE para materias PELIGROSAS.
- Almacenaje: mantener los recipientes cerrados. Almacenar en zona aireada. No es combustible ni inflamable. Conservar en condiciones ambientales que oscilen entre 5º y 30º.
- Identificación de los peligros:
- Presenta los peligros de su función básica.
- Efectos principales ligados a la propiedades irritantes.
- Irritante para las mucosas, piel y ojos.
DOSIFICACIÓN:
Añadir 1,5Kg. de pH MINUS para disminuir en 0,2 unidades el pH de 100 metros cúbicos de agua.
Diluir la quantidad necessaria de pH MINUS en agua y addicionar dicha solución sobre la superfície de la piscina.
El valor del pH del agua deberá estar situado entre 7,2 y 7,6 y su control se realizará diariamente por medio de un estuche analizador de pH.
El pH indica el grado de acidez o alcalinidad de una solución acuosa. La escala de valores pH va de 0 (alta acidez), pasando por 7 (neutra), hasta 14 (alta alcalinidad). Es imposible obtener un agua en óptimas condiciones si se olvida o no se le presta la atención debida al pH de la misma.
Un pH demasiado alto producirá:
- Turbidez en el agua.
- Formación de escamas o incrustaciones.
- Irritación en los ojos, oídos, nariz y garganta de los bañistas.
- Dificulta y retarda la eficacia del desinfectante encargado de eliminar los microorganismos del agua.
Son muchos los factores que alteran el pH del agua:
- La naturaleza química (dureza) de la propia agua de aportación.
- Productos químicos que se dosifican tales como hipoclorito sódico o de calcio, tricloro, etc.
- Las partículas que son introducidas en la piscina a través del aire o por los bañistas (suciedad, cremas, sudor, polvo, orina, etc.).